Estatua a El Moreno
Por Danilo Cruz Pichardo
No leo al periodista José Báez Guerrero, porque sus trabajos son lacónicos, no dicen nada. Usted puede redactar un comentario de dos o tres párrafos, pero jamás un artículo, donde las ideas expuestas demandan argumentos que permitan arribar a una conclusión que convenza al lector.
Un escrito de ocho o diez párrafos podría ser satisfactorio. Y cuando se trata de un análisis (que conlleva hipótesis, indicadores, desarrollo y conclusión) hay un segmento de mayor escolaridad que no lo desaprovecha.
En una sociedad donde impera el libre juego de las ideas hay que leer a todos, aun sean trogloditas. Báez Guerrero, quien censuró al alcalde Manuel Jiménez por haber levantado una estatua en honor a Maximiliano Gómez, acusó al extinto líder del MPD de asesinar a guardias y policías, de asaltar y robar. ¿Cuáles fueron esos guardias y policías que mató? ¿Dónde está el dinero que robó, porque doña Carmen y los hijos no heredaron nada? Se trata de imputaciones muy graves.
Para colmo: pide que se le haga un monumento a Enrique Pérez y Pérez, de quien hay pruebas que mató a dominicanos por razones políticas. Un alumno me envió por Whatsapp el escrito del comunicador. Cuatro pequeños párrafos con vocablos infames.
De El Moreno he escuchado muchas versiones y todas dicen lo mismo: que cursó un octavo curso, que trabajó en el muelle de San Pedro de Macorís, pero con una mente brillante, ideólogo y estratega. Insistía en unificar a la oposición para enfrentar al gobierno de terror deBalaguer. Es de ahí su amistad con el general Wessin y otros líderes de derecha.
En una ocasión escuché hablar a Arturo Uslar Pietri, intelectual venezolano, diciendo que la ideología marxista era impracticable, que en los países donde había triunfado el comunismo el proletariado era bajo o inexistente, por lo que fue un imposible establecer una dictadura bajo su poder. Y puso los ejemplos de China, Cuba y otros lugares. Concedí razón.
Es innegable, sin embargo, que la Revolución Cubana influyó mucho en los jóvenes de los países de la región, era una moda ser comunista, pero no era razón para asesinar a infelices muchachos que en algunos casos en el fondo no eran nada. Simplemente contagiados por el modismo de los clubes, la UASD y otros centros de estudios.
A Guido Gómez Mazara lo apoyé en las primarias del PRM. Es un hombre que no reniega de sus ancestros, valiente y no sé si procedería legalmente contra la agresión del referido periodista, que comete los delitos de difamación e injuria, los cuales condena la Ley 61-32 y los artículos 370, 371 y 372 del Código Penal vigente.
Mi consejo es que deje eso así, porque viene de sacar 60 mil votos (un 6%) en una contienda donde compite con un jefe de Estado y todo lo que implica. Es un presidenciable y no puede distraerse con todo el que le tire piedra. Además, siempre se ha dicho que “ofende quien puede, no quien quiere”.
Gómez Mazara es un hombre carismático y excelente expositor, cualidades que no perdonan algunos mezquinos.