Otro dominicano acepta irse en extradición para enfrentar acusación de estafa a adultos mayores
Los jueces pusieron a cargo de la Procuraduría General de la República la tramitación y ejecución de la presente decisión, de conformidad con los términos de la Constitución de la República y las leyes sobre la materia.
Los cinco detenidos en República Dominicana por el delito optaron por entregarse voluntariamente al país extranjero
Santo Domingo.- Los acusados de formar parte del grupo de dominicanos que estafaba a ancianos residentes en varios estados estadounidenses, Miguel Ángel Vásquez y José Ismael Diloné Rodríguez, decidieron este martes irse voluntariamente a ese país para enfrentar los cargos y no oponerse al envío a través de la justicia dominicana.
Los encartados aseguraron a los jueces de la Segunda Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia que no recibieron presión por parte del Ministerio Público, para decidirse a enfrentar la acusación en Estados Unidos.
Suman cinco los criollos que han sido apresados en territorio dominicano por el caso y optaron por irse voluntariamente. Los demás son: Rafael Ambiorix Rodríguez Guzmán, Félix Samuel Reynoso Ventura y Juan Rafael Parra Arias. Otros seis que se presumen están en suelo dominicano están prófugos.
Los 11 dominicanos acusados de operar desde el país la red de estafas enfrentarían, de ser encontrados culpables, una pena máxima de 20 años por cada uno de los cargos que el Departamento de Justicia presentó contra ellos en una corte de Nueva Jersey.
Contra el grupo de dominicanos pesan 19 cargos de conspiración de fraude postal y electrónico, fraude electrónico, fraude postal, conspiración para cometer lavado de dinero y lavado de dinero.
Como operaban
Los acusados trabajaban en centros de llamada (call centers) registrados en la República Dominicana desde donde se comunicaban con los ancianos en Estados Unidos haciéndose pasar por familiares y pidiéndoles ayuda económica para resolver alguna situación, por lo regular un accidente automovilístico.
Sus víctimas eran ancianos residentes en varios estados, incluidos Nueva Jersey, Nueva York, Pensilvania y Massachusetts.