Santo Domingo.- El vicepresidente ejecutivo de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Rubén Jiménez Bichara, aseguró este martes que cuenta con el respaldo personal del presidente Danilo Medina para seguir adelante con la construcción de las centrales de generación a carbón de 720 megavatios, pese a una sentencia reciente del Tribunal Superior Administrativo (TSA).
Jiménez Bichara insistió en que los abogados y la empresa que demandaron a la CDEEE para anular la licitación, en representación de la compañía china Gezhouba Group Company Limited (CGGC), sólo buscan “levantarse un dinero” con el proceso jurídico.
“¿Cómo puede darse una sentencia de un proceso que no existe?”, se preguntó respecto a la decisión relativa al proceso de licitación, aunque en todo momento rehusó identificar a los sectores interesados –desde su punto de vista– en boicotear el proyecto. “Los abogados ni siquiera se presentaron al tribunal, o sea, si le buscamos explicación normal, no se la vamos a encontrar”, dijo.
El TSA, encabezado por la juez Delfina de León Salazar, consideró como una inconsistencia asignar US$1,500 millones para una obra adjudicada por un monto de US$2,400 millones, y dispuso la suspensión de la licitación.
“El proyecto sigue su curso normal”, insistió Jiménez Bichara. Aseguró que cada día de retraso en la construcción de las dos plantas a carbón de la Central Termoeléctrica Punta Catalina cuesta a los dominicanos “3,200 dólares por minuto”, ya que el Estado gasta alrededor de 1,500 millones de dólares al año para mantener el servicio de energía eléctrica.
Si la planta a carbón operara en estos momentos, el kilo de energía eléctrica saldría en entre 8 y 10 centavos de dólar, dijo. Mientras, el Estado paga entre 18 y 20, y en muchas ocasiones debe comprar hasta a 42 centavos de dólar.
“El Estado se economizaría 560 millones de dólares al año, en diferencia de costo de compra en estos momentos”, sostuvo Jiménez Bichara. Pidió el apoyo de los medios informativos y los líderes de opinión para defender la construcción de las plantas a carbón como una de las vías de solución al problema de suministro de energía.
La CDEEE adjudicó la obra el 22 de noviembre de 2013 al consorcio encabezado por la compañía brasileña Odebrecht, del que participan la italiana Tecnimont y la dominicana Ingeniería Estrella.
Los cuestionamientos en el ámbito judicial son impulsados por el Consorcio IMPE, C. por A., representada por los dominicanos Raúl Cabrera y Manuel Sebastián, que demandaron a la CDEEE por la licitación, en calidad de representantes locales de la compañía china Gezhouba Group Company Limited (CGGC).
Jiménez Bichara defendió la transparencia de la licitación, en un almuerzo con ejecutivos de medios informativos servido en el restaurante Franciscus, ubicado en el sector Naco, de la capital. La actividad fue organizada y convocada por la empresa Odebrecht, aunque ninguno de sus ejecutivos estuvo presente en el lugar.
El funcionario, que se refirió a un estudio realizado por la compañía brasileña sobre las dificultades del país para comprar gas natural, aseguró no sentirse incómodo de fungir como vocero de la empresa. “Más que cuestionarlo, lo agradezco. Somos socios ahora mismo. Esa empresa tiene un proyecto con nosotros y somos socios. Ya ahí hay una unidad y estamos juntos en un proyecto”, apuntó.
Reconoció que Odebrecht tuvo una ventaja en el proceso de licitación, debido a que ya había realizado un proyecto para construir una planta a gas natural de 600 megavatios entre 2009 y 2010, durante el último mandato de Leonel Fernández.
“Ellos iniciaron un proyecto y montaron una planta a gas de 600 megas, buscaron financiamiento, equipos, lugares, todo… Cuando tienen todo montado no encuentran el gas, entonces hacen este estudio que costó diez millones de pesos, buscando gas en el mundo. Explican por qué no había gas en el mundo para el proyecto en ese momento y le presentan esto al presidente, el presidente le autoriza entonces que volteen el proyecto y lo hagan a carbón”, reveló.
“Cuando sale la licitación a cada participantes le dio seis meses, ellos (Odebrecht y sus socios) tenían tres años trabajando en eso. Tenía financiamiento para cada tramo del proyecto con una salida de emergencia en adición”, añadió. Consideró que con esa ventaja, “raro era” que perdieran el concurso en el que participaron 54 empresas, con cuatro finalistas.
Los números dan oscuridad
Jiménez Bichara presentó un panorama tétrico para explicar la oscuridad en que viven los dominicanos. Recordó que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, advirtió en Costa Rica a los diez países de la región que demandan gas natural no pueden esperarlo antes de 2020.
Según el funcionario el sector tiene un déficit al año de 1,229.7 millones de dólares, que sube a más de 1,500 millones si se contabilizan las ventajas impositivas que reciben las empresas generadoras.
“En 2013 el déficit, los 1,200 millones de dólares. Claro yo siempre he dicho que eso no es del todo cierto, que está sub-valuado ese subsidio, claro, porque ahí no están todas las exoneraciones que tienen los generadores: de combustibles, de aceite, de piezas; o sea, si ustedes le suman todo eso yo creo que vamos a caer todo al piso y va a ver que buscar berrón para pasárnoslo por la nariz”.
Explicó que el 77% de los 1,229.7 millones de dólares se destina a la compra de energía; 10% a gastos operativos; 8% a capital propio y 5% a gasto de nómina y personal.
Resaltó además que mientras con gas la producción del kilovatio hora cuesta unos 10.3 centavos de dólar, el Estado debe pagar ahora entre 18 y 20 centavos de dólar y hasta 35.2 centavos de dólar la energía producida con fuel oil.
El funcionario informó que aunque existen plantas de producción de energía eólica, cuando el Estado va a pagar la factura el costo se indexa como si la producción se realizara con petróleo, debido a los acuerdos de Madrid que culminan en 2016. Según los datos que presentó, el 57% de la energía se paga con precios indexados al componente del fuel oil.
“Cuando se paga con el acuerdo de Madrid el contrato te obliga a indexar a petróleo. La eólica de Los Cocos es eólica, pero se indexa a petróleo”, sostuvo.
Dijo que si el proyecto de las plantas a carbón sigue su curso estaría listo en el tercer trimestre de 2017 y que en 2016, el Estado tendrá que volver a renegociar contratos con los generadores, aunque espera que sea en condiciones más favorables para los dominicanos.