
La suerte está echada…
Por Gilbert Arturo Rojas Rigaud
La realidad del panorama político de República Dominicana cambió radicalmente en el momento exacto en que el presidente de nuestra nación y actual precandidato presidencial por el Partido Revolucionario Moderno, Luis Abinader, anunciara su postulación para optar por cuatros años más como primer mandatario, “la suerte está echada”, como dijera uno de los políticos y militares más importantes de la antigua Roma, Julio Cesar.
Con Abinader en el cuadro político para la contienda del 2024, todo cambia, tanto para la oposición, como para los que aspiran dentro de su mismo partido. Y hay que hablar claro, seguimos siendo un país presidencialista, la corriente va en dirección a lo que diga el presidente, nadar en la trayectoria contraria es, literalmente hablando, un suicidio político.
Pese a esto, y creo que como un hecho que solo ocurre en nuestro país, dentro del Partido Revolucionario Moderno hay quienes aspiran a la presidencia, y están dispuestos a ir a una contienda internar, para intentar arrebatarle lo que por derecho constitucional le corresponde al actual presidente de la nación.
Una enorme pérdida de tiempo, porque las encuestas hablan por sí solas, y una enorme pérdida de dinero. Para decirlo más sencillo: que la sensatez se imponga, si el presidente aspiró, hay que abrirle camino y sumarse a su causa, como hacen en las naciones desarrolladas.
Y hay que estar claro, dicho de nuevo: somos “un país presidencialista”, en donde, la decisión de reelegirse, arrastrará consigo a una victoria contundente a los que también han optado por cargos congresuales y municipales, y esto es lo que preocupa a la oposición que no encuentra por donde atacar más que por el ridículo tema de “no a la reelección”.