El feminicidio un mal preocupante
Por Darwin Feliz Matos.
El incremento del número de feminicidios constituye un grave problema social en la República Dominicana, a diario en los principales medios noticiosos vemos un caso de violencia pero nos llena de sorpresa ver como los casos de feminicidios que predominan en la sociedad dominicana, nos lleva a reflexionar ante este mal.
Esta discriminación, se pone de manifiesto por el tipo de violencia, pues muchas veces se presentan casos con componentes de violencia sexual, además de que subyace la falta de prevención así como de una investigación seria y diligente para este tipo de asesinatos, lo que demuestra que para las autoridades, ésta no es una situación grave o prioritaria y esto propicia que los crímenes se mantengan en la impunidad y se continúen cometiendo, pues como no es un secreto de nadie que los casos cuando son denunciados no le dan el debido seguimiento hasta que acontece el crimen.
La gran cantidad de niños que quedan huéfanos, por el asesinato de sus madres es algo que debe buscársele una rápida solución a este mal que mantiene en pánico a todo un país, puesto que no estábamos acostumbrados a este auge de violencia existente en nuestra nación en los ultimos dias.
Las causas son muchas, desde la crisis económica, el alto índice de desempleo, la descomposición social, así como el poco respaldo de las instituciones que trabajan con la familia, que debían servir de orientadores a los hogares a fin de fomentar la unidad y preservar la paz, puesto que la prevención es la principal herramienta para disminuir los niveles de violencia existente en la actualidad.
La violencia intrafamiliar debe ser denunciada al menor asomo, para prevenir los crímenes ejercidos contra las mujeres y no convertirse en cómplices silentes de estos aberrantes crímenes y abusos, pero de igual forma las mujeres deben ser mas comprensivas y evitar discusiones estériles en los hogares, para de esta forma preservar la paz y garantizar que sus hogares no se vean enlutados por la irresponsabilidad y la incomprensión de las esposas en momentos tan difíciles.
Es preciso buscar alternativas para frenar esos crímenes tan aberrantes y tan odiosos, desde focalizar las causas que las provocan así como sus terribles consecuencias, en donde no tan sólo enlutan a los hogares sino que dejan a los niños en la orfandad, sin protección y al libre albedrío, en un país en donde se va perdiendo los principios y la integración familiar.
En un compromiso no sólo de las entidades gubernamentales, e instituciones sin fines de lucro sino además debe urgentemente legislarse para corregir esta situación que sigue enlutando a las familias dominicanas.